País: Brasil
Título en inglés: Invisible Life.
Título en español: La vida invisible de Euródoce Gusmao
Año: 2019. Duración 139 minutos.
Director: Karin Ainouz
Actores: Julia Stockler, Carol Duarte, Antonio Fonseca, Bárbara Santos, Gregorio Duvivier.
Sinopsis. Ambientada en Río de Janeiro de los años cincuenta, nos narra la historia de dos hermanas cuya pasión y carácter son mermados por las costumbres y las tradiciones. La necesidad de cosmopolitismo de una y el sueño de ser pianista de la otra hará que ambas se protegan y se vuelvan complice para tratar de acariciar sus deseos, pero la película presenta la vida como un laberinto y en ella entramos todos con una alta probabilidad de perdernos y perder a lo que amamos.
Pensar la película. Esta película brasileña pasa por debajo de la mesa, sin grandes premios ni gran publicidad, poca personas reflexionan o comentan la película. Los curioso es que es ésta película, al igual que la serie brasileña Coisa mais linda, nos habla de una época de machismos políticos y culturales que se explanaban en el Brasil a mediados del siglo pasado y por extensión a toda Latinoamerica. Pero a diferencia de la serie que mantiene dramas para justificar la tensión, la película nos ofrece una tragedia griega con todos sus actos y condiciones. Siempre he visto a la tragedia griega como una lucha de voluntades para superar el destino, la predestinación; así vemos luchas obscecadas para cambiar el futuro que realiza el padre de Edipo, la nodriza de Oreste o el tío de Antígonas, pero al final las tragedias griegas nos recuerdan que ya los dioses se han olvidado de sus decisiones sin importar los dramas humanas que se desarrollen. En A vida invísivel, además del rastro de tragedia griega que presenta, apunta a un valor que los movimientos feministas trantan de enclavar en la realidad práctica pero que casi nunca se menciona y es el carácter de la mujer. No necesariamente el carácter que vulgarmente se entiende como un rasgo de personalidad y que está en medio camino entre una mirada terca y una actitud estóica, por lo tanto sedimentándose entre los deseos y sentimientos, sino vista como un valor ético que atribuímos a las relaciones con los demás. Así el carácter desde sus más lejanas etimologías siempre a mostrado una actitud hacia el mundo y las personas, por lo tanto una de las peculiaridades del carácter es su durabilidad en las ideas y sentimientos. Alguien con carácter no cambia sus ideas ni sus sentimientos por los vaivenes del día a día o por las circunstancias económicas o emocionales que lo puedan atrapar. A los cambios, a lo precario de las ideas, a lo relativo de los sentimientos se le aferra el término corrupción el cual se puede simplificar como: el caer en lo oportuno de la situación, o por lo menos así podríamos interpretarlo en la palabra japonesa daraku 堕落 cuyo kanji nos da la idea de algo que se precipita en las conyunturas. El carácter expresa una lealtad y compromiso mutuo, bien a través de la búsqueda de objetivos a largo plazo, bien por la práctica de postergar las gratificaciones en función de un objetivo futuro. Este carácter se prensenta en las dos hermanas de nuestra película: Guida y Eurídice. La película es un canto a sus carácteres y cómo una función del machimos tradicional es cercenar el carácter de la mujer, lo vemos en la mirada de su padre, de los hombres que amaron, de los amigos que aparecen y desaparecen. La mujer por diversas circunstancias históricas se le ha impuesto un carácter a través de la maternidad, su objetivo a futuro es la crianza de niños, su compromiso y lealtad debe de ser con su padre o el padre de sus hijos. Desde el código de Hamurabi hasta la Constitución de los EE.UU. la mujer siempre ha tenido un sólo carácter ético y es su vinculo con la maternidad, de aquí que cuando una mujer muestra su carácter como un valor ético no impuesto por la cultura o la ley, lo vemos exótico, extraño, no propio de la mujer. Esta visión de una mujer sin carácter es la que la cultura más a explotado, así como su supuesto único carácter ético es su relación con la vida, pero entendida ésta como reproductibilidad. Por lo tanto si vemos esta película, disfrutamos cómo se marca el carácter de las hermanas entre ellas, así su lealtad, sus objetivos, sus sentimientos son niñerías para los hombres que siempre tienen "carácter". Dicen que las mujeres políticas son mejores que los hombres, es posible, ya que bien sea por estadística o por historia, el hombre cae velozmente hacia las convenecias perdiéndo su carácter, mientras que por estádistica o por historias, las mujeres mantienen su carácter dentro de la política porque sus objetivos y lealtad se han enraizado dentro de una cultura que no les creen que posean caracter como valor ético, por lo que deben desmotrar como cualquier ser humano las posibilidades de la construcción de un caracter como necesario y autentico. Esta película es un canto contra los relativismo que vienen galopando en las opiniones públicas, de desmitificar un empoderamiento que se pierde en los bordes entre la ley, la cultura, y la esquizofrenias, y que nos apuntan a una primera estación que se debe reconocer y repensar, el caracter como un valor ético posible y neceario en cualquier ser humano sin importar género, raza o cualquier diferencia cultural.