lunes, 7 de abril de 2014

BONG JOON-HO: EL CREADOR DE FISURAS

Bong Joon-ho
Durante muchos años la palabra deconstrucción y sus múltiples sentidos estuvieron en boga dentro de los ámbitos académicos y artístico. Entre los teóricos del movimiento se encontraba su gurú: Jacques Derrida. La definición del propio Derrida es "simple": plus d´una langue, es decir, más que un idioma y no más que un idioma. De esta definición "simple" se escribieron miles de páginas. Una vez traté de explicarle a Mi Amiga Japonesa qué era la deconstrucción luego de ver una película de Bong Joon-ho. Hallé el término traducido al japonés como『脱構築・だつこうちく』Al estudiar kanji a kanji, la palabra déconstruction dio el siguiente giro; el primer kanji da la idea de remover, escapar, dejar afuera; el segundo proporciona la idea de marco, de combinación o de construcción, pero también de postura o pretensión; el último kanji da la idea de fabricar o construir; es decir, que libremente me explico que para el japonés que no lee a Derrida, esta combinación de kanji podría indicarle algo así: Una construcción combinada que tiende a escapar. Se lo explico a Mi Amiga Japonesa, pero igual, a ella le parece confuso y sin sentido para hablar de un filme que acabamos de ver y que se puede calificar como una sencilla película de Ciencia Ficción. Es probable que sí, que el atrincherarse en los conocimientos académicos en la mayoría de los casos es absurdo e innecesario para el día al día del mercado, del entretenimiento, del placer; es como si en el fondo uno quisiera que no lo entendieran, así que le tuve que explicarle mis percepciones de la película a Mi Amiga Japonesa a través de una metodología de categorías, como le encantaba a Aristóteles. En mi interior veía los filmes de Bong Joon-ho como metástasis de la idea de deconstrucción.
Perro que ladra no muerde
Ahora escribo algunas ideas sobre el cine de Bong Joon-ho acompañado con la idea de deconstrucción o aquella construcción combinada que tiende a escapar. Bong Joon-ho es un director coreano que fisura la realidad con lo obvio; así dentro de una trama, el coreano logra, por medio de juegos de imágenes, presentar las posibilidades de interpretación varias para llegar a un final predecible, pero el final de la película mostrará que todas aquellas prediciones e interpretaciones erán erradas, porque el final Bong Joon-ho introduce un  sentido o sentidos (a veces absurdo, a veces lógico), y no interpretaciones. Estos sentidos se combinan y se deslizan con lo obvio; es posible por eso que lo obvio pase de largo en nuestra interpretaciones y sólo al final las descubramos, de aquí parte del éxito del director. Las imágenes presentadas y su montaje nos da una narración que no busca explicar una trama, son narraciones que introducen sentidos y en esa medida, la película logra una autonomía que sólo podemos percibir al final. Bong Joon-ho comenzó su recorrer artístico con una película titula 플란다스의 개 del años 2000 y que fue traducida al inglés como Barking Dogs Never Bite o con nuestro título castellanizado: Perro que ladra no muerde.  
Barking Dogs Never Bite
Perro que ladra no muerde, es una historia en principio sencilla: un aspirante a profesor casado con una mujer que tiene un trabajo común y además esta embarazada. El filme nos muestra cómo ambos hacen su vida común, viviendo en una urbanización común. Y es precisamente dentro de este esquema "normal" o "común" donde se da lo anormal. Nos percatamos de las mafias académicas (Bong Joon-ho siempre hará en sus filmes sutiles críticas a la academia, a los profesores, a las investigaciones), de la abulia del matrimonio, de los hábitos de los vecinos, de la ineptitud de los vigilantes. Bong Joon-ho nos nuestra las relaciones que están detrás de una comunidad, convivencias que siempre muestran patetismos agazapados. La película gira alrededor de los ladridos de los perros, de las mañas de sus dueños, de las vinculaciones de la sociedad hacia la Naturaleza. Son los detalles que se escapan, lo pie de páginas, las fisuras en las realidad incólume, como son los ladridos, un hombre comiendo en el sótano, una llamada, un motorizado con el casco oscuro puesto; quienes muestran las partes obvias que buscan escapar de la construcción de hogares felices y donde los animales y la bestialidad reinan. Bong Joon-ho hace una crítica social, pero con un tono perplejamente directo, sin sarcasmos ni cinismos de los cuales se alardean muchos directores y críticos de cine. Presenta lo obvio que todos saben, pero que no se dice, el coreano tiene la cualidad de mostrar las fisuras en una pared que llamamos realidad, y estas fisuras son provocadas por las cosas obvias. Usando el poder de las imágenes el director recrea los malestares, los desconsuelos, las mentiras que van hilando una trama de impotencia cuyo final es predecible dentro de una poética equilibrada; pero quizás, como estamos demasiados acostumbrados a finales "originales" o "ingeniosos", nos atragantamos en los juicios de un final que nos aturdirá.
Crónicas de un asesinato
Su película 살인의 추억 del año 2003 traducida al inglés como Memories of murder o sencillamente: Crónicas de un asesinato, muestra un talento particular del director y con el cual comenzará a estampar su estilo. Es posible que esta película policial sea una de las mejores realizadas a principios del siglo XXI. Basada en hechos reales, sencillamente Bong Joon-ho nos muestra mo las interpretaciones construidas sobre interpretaciones de un asesinato en serie, se escapan de cualquier juicio "lógico", porque todas las interpretaciones están sostenidas por prejuicios. Bong Joon-ho nos enseña cómo las construcciones de la realidad tienen un peso fijo y constante en los prejuicios. Nuestro director nos va mostrando que todo lo que parece no es, aunque los protagonistas quieren creer que lo es. Lo obvio golpea la realidad y ésta se vuelve a escapar. La policía busca a un monstruo, a un pervertido, a un zafio, a un andrógino, a alguien extraño; cualquier ser humano que no sea tan humano, porque los crímenes que reflejan la película sólo lo podría hacer un ser bestial para los ciudadanos, deshumanizado para la policía, espectral para los periodistas. 
Memories of Murder
La policía usa todos los medios para que sus creencias coincidan con la realidad, usando la violencia y la tortura para su fin; los periodistas confunden los sentidos para que en cada instante la noticia coincida con la realidad, los ciudadanos temen, así prolongan sus prejuicios sobre la realidad; los hechos nunca coinciden con las creencias por lo que las explicaciones no logran hallar los motivos de los asesinatos. El criminal nunca será hallado. Tiempo después el dectetive principal del caso se encuentra en las cercanías de un lugar donde se cometió uno de los crímenes, y mientras recuerda lo sucedido, una niña se acerca y le asegura que ha venido una persona a visitar ese lugar varias veces. El detective cree que la niña a visto al monstruo, al asesino y ante esta expectativa pregunta: ¿cómo era ese señor? La niña responder: una persona normal. Toda la construcción sobre la realidad del asesino que se realizó a lo largo de la película a partir de lo anómalo, del miedo, de los prejuicios, es falso. El asesino es una persona común y corriente, lo obvio se escapa de nuevo, lo obvio era la norma a investigar
El Anfitrión
El cine de Bong Joon-ho es un cine que busca mostrar y ver por las grietas de las creencias que siempre tratan de frisar la pared de la realidad. En su tercera entrega 괴물 de 2006 y traducida al inglés como The Host, o El anfitrión en español, nos encontramos con los elementos que le darán carácter a las obras de Bong Joon-ho. Lo eficiente se transforma en ineficiente como: el ejército, las industrias de salud, los investigadores, el gobierno, la sociedad en general, la familia en particular. El filme gira alrededor de una familia común: la familia Park, compuesta por un padre que no es un padre sino un eterno adolescente, una tía que no es una tía sino una heroína cobarde, un tío universitario que no vive como un exitoso profesional egresado de una universidad coreana, sino como un desempleado que se camufla en trajes y coches, una hija que no es una hija sino una adolescente sabelotodo; todos estos miembros orgullo de un abuelo que no es un abuelo sino una conciencia decaída que administra una tienda de venta de bebidas y tentempié al lado del río Han; a estos personajes le acompaña un monstruo creado por la misma sociedad. La película crea diversas direcciones de interpretación por los constrastes de los elementos presentados, pero al final será la imposición del sentido lo que impondrá Bong Joon-ho. 
The Host
Todo es ilusión, el abuelo no será héroe, el ejercito un cúmulo de ineptos, los médicos unos estúpidos, el padre no será el padre de su hija porque la hija no sobrevivirá así que deberá reconstruírse como padre, el gobierno no protegerá a sus ciudadanos, los tíos desaparecerán en acciones predecibles, y solamente un inocente sobrevivirá luego de conocer el terror que engendra la desdicha. Todo los cuerpos de la sociedad no parecen ser lo que son, no se articulan con armonía o racinalidad, así como la criatura que desde el río Han consume la intrepidez y gallardía de los nobles que morirán por las manos más insospechadas u ¿obvias?: la Naturaleza. Bong Joon-ho nos muestra la eterna dialéctica entre la naturaleza y la sociedad, que creemos que en el fondo enfrenta las negligencias del hombre y sus egos heroicos con lo que es absolutamente necesario y continuo. Sólo la inocencia da descanso a esta lucha; en el filme, el descanso aparece en las escenas con los niños. Al final un niño sobrevivirá al ataque del monstruo, el más inocente o el quien tenía más hambre por vivir como es la necesidad de la naturaleza y su principio activo.
Tokyo (Gondry, Carax, Bong)
La cuarta entrega de Bong Joong-ho, fue un corto dentro de la película Tokyo de 2008. La película está compuesta por tres cortos, dirigidos respectivamente por: Michel Gondry con su corto: Interior Desing, donde resumen el ser objeto y/o el ser sujeto dentro de un mundo asfixiante como es Tokyo; Leos Carax con su corto Merde, personaje bizarro que sale del interior de nuestro inconsciente, del subsuelo, de las cloacas y que no reconoce el bien ni el mal sino sólo la belleza y que perfeccionará para su filme Holy Motors del 2012, el tercer corto es Shaking Tokyo o Sacudiendo Tokyo de Bong Joon-ho. Historia que concentra la idea de lo que es no parece, de la ineficiencia, de los prejuicios y en este particular filme la aparición de la confusión frente al orden y el descontrol de las obsesiones para mostrar la realidad que esconde. En la película de Bong Joon-ho todo es ordenado, existe el más pulcro orden, pero en apariencia, serán las sacudidas del alma, de la Naturaleza, de la historia, del pensamiento lo que nos mostrará el orden falso que sostiene todo orden; todo lo anterior será visible después de un temblor, de terremoto, que dejarán aflorar en sus grietas la verdad. Una historia sin moralejas, donde al final toda Tokyo se ha convertido en un inmenso espacio habitado por hikikomori, seres que sólo pueden construir su mundo desde sus miedos y gracias a la protección de unos padres culpables por haberlos traído al mundo y que previamente, he reseñado éste fenómeno japonés por aquí en este blog.
Madre
Madre, un filme de 2009, delinea la estética de Bong Joon-ho con precisión. Cada personaje busca que sus creencias, prejuicios y traumas se adapten a la realidad que perciben única, y que a su vez, sea concordante con sus criterios de verdad y vida. Pienso que Bong Joon-ho se divierte mostrando cómo la verdad se desliza entre las grietas para resquebrajar una sólida pared de realidad frisada con prejuicios, pared que termina de desmoronarse, construcción que termina escapando cuando menos se espera, a veces por el peso inadvertido de lo obvio. Esta película busca los límites de una relación entre una madre que lleva el peso de tener un hijo con cierto grado de retardo mental y la vida de éste en una comunidad que abusa o ignora su condición. El filme muestra el drama de la madre, como cientos de películas que tocan el tema, pero a diferencia de las otras películas "maternas", Boog Joon-ho comienza a explorar la confesión como un espacio de develación, la confesión como método para la suspensión de las narrativas lineales; así que en un interludio la medre se confieza, pero sin que posteriormente la realidad cambie, quizás porque la confesión siempre proviene del pasado hacia el presente y no hacia el futuro. 
Mother
La película tiene varias confesiones, como en todas las películas de Boog Joon-ho, pero a diferencia de las otras, donde las confesiones llegaban por presión indirecta: el policía que torturaba a los sospechosos, el asistente de profesor que fue presionado por la inocente para relatar su avesión a los animales y la necesidad de aceptarlos, o el hikikomori que confiesa sus crisis en voz en off; todas estas confesiones son más bien como prolongaciones narrativas, pero en la película Mother las confesiones nacen, no por presiones externas sino por colapsos internos, por quiebres afectivos donde las culpas aparecen; en principio para realiza catarsis, posteriormente para apaciguar la agonía. Las confesiones se desvanecen o se pliegan a las realidades que el protagonista quiere ver y no la cambia, aunque obsevamos cómo estas realidades escapan sutilmente
Rompenieves
Todos estos elementos se reunieron para la última dirección de Bong Joon-ho realizada el año pasado (2013): 설국열차 y que comercialmente se conoce como Snowpiercer o Rompenieves. Esta película de producción corea-americana, es una película de Ciencia Ficción con rasgos distópicos, donde la jerarquía no es vertical sino curiosamente horizontal. Wilford (Ed Harris) creador y genio que mantiene a la humanidad con vida dentro de un tren, es cuestionado por los habitantes del vagón de última clase porque sus peticiones no son atendidas, esto generará una revuelta. En el filme Bong Joon-ho desarrolla toda una serie de argumentos, fisuras, deconstrucciones, juegos especulares, confesiones; que permiten detallar desde diversas perspectivas la película. Este filme que vi con Mi Amiga Japonesa y que traté de explicar con puras teorías académicas, al final tuve la necesidad de mostrarle mis ideas a través de categorías o grupos temáticos vinculados con las proposiciones estéticas de Bong Joon-ho, para explicar mi parece acerca de la construcción de la realidad. Si observamos cada elemento que hemos registrado anteriormente sobre el estilo de Bong Joog-ho hallaremos lo siguiente en su última producción:
Rompenieves
1) Lo que parece no es. En Memories of murder nadie es lo que parece ser; igualmente en Rompenieves el héroe no es héroe, los malos no son malos, la maestra bondadosa no es una maestra bondadosa, los miserable y marginados no son miserables ni marginados. 2) La realidad se escapa en los detalles. En Shaking Tokyo son los detalles lo que obsesiona al hikikomori, de hecho comienza a sucumbir al amor cuando descubre a una mujer que tiene una precisión certera para descubrir los detalles, lo que lo descoloca de su control. Rompenieves está lleno de detalles que develan que las cosas no son como se presentan, como un chef de sushi afro descendiente o la droga que en el fondo es un explosivo plástico. Los detalles abruman, inclusive develan como en el caso Curtis (Chris Evans) cuando logra completar lo que realmente ha ocurrido en el tren en los diecisiete años que lleva transitando por una circuito infinito, cuando, por ejemplo, detalla cómo se producen las barras proteínicas que alimentan a los habitantes del último vagón, una manera in extremi para eliminar la hambruna. 
Snowpiercer
3) Los prejuicios como constructores de realidad. Barking Dogs Never Bite es una película donde se muestran los prejuicios constantemente en una sociedad normal y como a partir de estos, se instala la desconfianza entre sus habitantes; todos los miembros que participan en la revuelta que se realiza en Rompenieves tienen prejuicios, todos los miembros se miran con desconfianza, nadie confía en nadie y nadie tiene claro los por qué. En el filme obsevamos como las acciones y los conocimientos de Namgoong (Kang-ho Song) son depreciados por ser vicioso o las ideas de Curtis o de Edgar (Jamie Bell) son censuradas por los prejuicios de los padres, aunque ellos al final cambian, no por sus necesidades sociales, sino cuando son secuestrados sus hijos, cuando su naturaleza es herida. 4) La ineficiencia de las fuerzas de control. The Host muestra la ineficiencia del ejercito; las fuerzas armadas son una parodia de violencia e ineptitud, así también se presentan en Rompenieves, el ejercito es nefasto, no logran controlar la subversión ni sus crímenes, la ley no tiene fuerza.
Rompenieves
5) La confesión como momento de suspensión de la realidad. Mother plantea la confesión como un momento crucial, como la que hace la madre ante un sacerdote, a veces por presión como lo hace el hojalatero a la madre. La confesión son momentos de suspensión de la narración, lo que generarían cambios en su acción, pero en el fondo esto no ocurre. Cuando la madre se confiesa no ocurre nada, pero cuando el hojalatero se confiesa es asesinado, la confesión siempre perjudica a los otros, no al confesante. En la película Rompenieves la confesión de Curtis, el héroe, donde relata que había hecho actos ignominiosos, no lo hace cambiar, pero tampoco afecta a Namgoong quien lo escucha, porque él no entiende inglés. La confesión de Wilford a Curtis da sentido a la narración de la película y también genera la cólera de Curtis. Bong Joon-ho nos presenta el filo de las confesiones, siempre es un arma para el otro y no para el quien se confiesa. 6) La inocencia salva. En todas las películas de Bong Joon-ho aparece un inocente como redentor, y siempre sale libre de las situaciones, se salva, en la mayoría de las películas son niños o adultos con un aire cándidez como en Barking Dogs Never Bite, en su último filme no será la excepción. En Rompenieves Yo Na (Ah-sung Ko) y el hijo de Tanya, serán al final, los únicos representantes de la humanidad.
Snowpiercer
7) Enfrentamiento entre la Naturaleza y el hombre. La naturaleza humana subordinada a la Naturaleza se enfrentan como Lucifer con Dios. El final de la película aparecerá el ciclo eterno de estos encuentros, los niños sobrevivientes de la naturaleza humana para enfrentarse a una helada naturaleza hostil y su metáfora de peligro en el oso polar que los ve. Finalmente cierro mi explicación de la película de Bong Joon-ho a Mi Amiga Japonesa, ella acepta algunas razones y otras no, al final me quedo solo frente a la pantalla de mi computadora y pienso que en el fondo lo difícil de explicar a Mi Amiga Japonesa es que hay un constante telón de fondo nietzscheano y que los deconstructivistas y posmodernos aprovecharon. Pienso que para Nietzsche la voluntad no era ciega como había planteado Schopenhauer, ni tampoco pensaba que era pura voluntad de vivir, como lo plateaban algunos darwinianos; entendía la voluntad como una inclinación hacia la adquisición de poder. Pienso que el poder, su obtención, sus encuentros con lo obvio y sus fisuras con la realidad, así como algunas de sus huídas, marcan los dilemas finales en las películas de Bong Joon-ho, de aquí la riqueza de reflexiones que volverán paradójico toda construcción sobre una realidad certera y fiel y que poéticamente se trata de mostrar en Snowpiercer.

3 comentarios:

  1. Magnífico tu blog. te acabo de conocer, te encontré en el blog de vero donde recién vi "de tal padre tal hijo". espero seguir leyéndote. pregunto: puedo compartir tus reflexiones, citándote?

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  2. Hola Norma… claro que puedes compartir mis reflexiones como quieras… saludos y gracias por leerme...

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